Pros y contras de teñirse el pelo con colores de fantasía
En los últimos tiempos estamos viendo que los colores más atrevidos vienen de moda también para los tintes de pelo. Una tendencia que comenzó hace ya bastantes años pero que parece haber encontrado en el color block el momento ideal para ser lucido por un mayor número de público. Rojos, verdes, azules, rosas dan un toque diferente a cualquier look, sea cual sea tu corte de pelo y tu estilo. Un toque que en ocasiones se convierte en un quebradero de cabeza cuando llega la hora de prescindir de él.
Por ello hoy veremos algunos pros y contras de teñirse el pelo con colores de fantasía, así podrás tenerlos en cuenta antes de tomar la decisión de cambiar de imagen a través de esta moda. La ventaja que más podemos destacar es que en la actualidad no hay una única premisa a seguir, esto es, no tendrás por qué lucir el total del cabello con el color que quieras utilizar, ya que estamos en un momento en el que casi todo vale. De este modo, podrás limitar la técnica a alguna mecha suelta, las puntas, el flequillo o cualquier otra zona que quieras destacar.
Esto significa que la decoloración previa que has de ponerte para que el color quede bien fijado no tendrá que ser tampoco en toda la cabeza. Asimismo, con la moda de las raíces oscuras también podrás evitar retoques constantes cada 20 o 30 días. Eso sí, conviene que utilices siempre champús y mascarillas que te ayuden a conservar el color, teniendo en cuenta por ejemplo, que los tratamientos anti-caspa y anti-grasa eliminan mucho antes los tintes.
Esto es importante para evitar una de las desventajas, y es que a pesar de que estos pigmentos son difíciles de eliminar, sí que pierden la fuerza y vivacidad con los lavados. Aunque la mayor desventaja está en lo difícil que resulta eliminarlo del todo cuando te lo quieres quitar. Para ello, deberás recurrir a un corte de pelo considerable (que nadie suele quererlo) o con la aplicación de decapantes de color, un producto con el que conseguirás una base con la que podrás teñirte de nuevo con tonos más naturales.
